Noroeste del Conurbano POR LA MUERTE DE LUCÍA COSTA EN BAR ZAR DE SAN MIGUEL, CARLOS OLIVERIO CONDENADO A SEIS AÑOS Y DETENIDO DE INMEDIATO - Noroeste del Conurbano
En el Juzgado en lo Correccional Nº 3 de San Martín en el día de hoy se condenó a seis años de reclusión efectiva, por homicidio culposo, a Carlos Oliverio, en relación a la muerte de Lucía Costa, incinerada en el bar Zar, de propiedad del condenado.
En los homicidios culposos, las penas oscilan desde 1 a 5 años de prisión (figura básica) y de 3 a 6 años (agravadas por la concurrencia de culpa temeraria).
La justicia ordenó la inmediata detención de Carlos Oliverio (ver foto).
En tanto, Marina de los Ángeles Ramírez, la encargada del local fue absuelta.
La camarera, de 18 años, será juzgada aparte, ya que se presentaron pericias psicológicas y otra serie de medidas, que postergaban la realización de este juicio.
LOS OTROS INVOLUCRADOS
Hasta ahora el municipio de San Miguel está saliendo injustamente impune, pese a elementos probatorios que comprometen a sus dirigentes, desde el intendente, el secretario de Gobierno de ese momento y el jefe de inspectores.
Los Bomberos Voluntarios de San Miguel, responsables de la inspección y habilitación en el área de seguridad, entregaron al comienzo de la causa, una nota a la fiscalía, afirmando que ellos no habían habilitado al bar Zar, por lo cual no podía estar abierto y funcionando.
En el momento de los hechos (octubre de 2020), el entonces jefe de Gabinete bonaerense Carlos Bianco, declaró a la prensa, que en una conversación telefónica con el intendente Jaime Méndez, éste había admitido que el bar Zar estaba abierto con acceso al público, antes que el protocolo provincial sobre Covid lo permitiera. Admisión de culpa obligada, puesto que es público y notorio que el protocolo de la cuarentena de Covid, posibilitó apertura de locales nocturnos en forma posterior a la apertura del bar Zar.
La utilización de fuego vivo en mesas y barras está prohibido no por Covid, sino por seguridad en general, por lo cual esos pebeteros alimentados a alcohol, jamás debieran haber estado en las mesas.
También habría testigos de la presencia de dos inspectores en el bar esa misma noche. SI no inspeccionaron lo que aquí denunciamos ¿para qué estaban allí? El que quiera sugerir cohecho, es libre de hacerlo.
NUEVAS CAUSAS
Por eso, además de la causa principal, también se abrió una investigación en la UFI N° 20 por el delito de robo ya que, tras el incendio, muchos de los jóvenes afectados perdieron sus pertenencias y no pudieron recuperarlas. Una de esas cosas fue el celular de Lucía.
Del mismo modo, se inició en la Fiscalía N° 8, a cargo de la fiscal Verónica Pérez, una causa administrativa contra los responsables de las habilitaciones y los controles por parte del municipio, ya que según la pericia que hicieron los bomberos en el lugar, el bar no contaba con ninguna de las medidas que debía tener para estar abierto al público.
Además, en ese entonces sólo se podía salir a comer al aire libre por las restricciones impuestas por el Covi-19, y dentro de Zar había alrededor de 80 personas y muchas de ellas ubicadas dentro del establecimiento. Por esta situación, hay tres personas imputadas.