Noroeste del Conurbano LA REGIÓN RECIBIÓ AL GOBERNADOR KICILLOF EN JOSÉ C. PAZ MOSTRANDO OBRAS Y EL MÚSCULO POLÍTICO DE LAS INTENDENCIAS - Noroeste del Conurbano
Se acercan las PASO, cada cual atiende su juego, y en ese juego entra que la dirigencia provincial y nacional de Unión por la Patria, con la inmensa mayoría en las listas de candidatos legislativos sin territorio ni apoyo territorial, visite intendencias buscando el contagio electoral desde las bases.
Cuando la derecha macrista controlaba las gestiones de Nación y provincia de Buenos Aires, fueron los intendentes peronistas los que bancaron los trapos; pero en 2019, con el retorno del peronismo al poder político, la superestructura se olvidó de eso, los dueños de los timbres y las lapiceras se arrogaron todos los méritos y le dieron la espalda a los intendentes.
Axel Kicillof gobernó casi dos años con un gabinete de tecnócratas, pero aprendió con la cachetada electoral de las PASO de 2021. Comenzó a abrir la gestión política, no en la medida deseada, pero lo hizo.
Con Leo Nardini (intendente de Malvinas Argentinas con un 68,2% de votos) en Infraestructura y Servicios Públicos, cartera vital que dio vuelta la taba, en 2021 (año electoral) en nueve meses se había concretado solo el 21% del presupuesto, en menos de tres meses Nardini ejecutó el 20%. Con Nicolás Kreplak en Salud, que le dio un nuevo impulso a una gestión que había sido buena en la pandemia, asumiendo el desastre que dejó la contragestión de María Eugenia Vidal. Con Cristina Álvarez Rodríguez en Gobierno y Martín Insaurralde en jefatura de Gabinete se dotó del diálogo político necesario.
Pero igual la deuda con los intendentes quedó pendiente. En estas elecciones 2023 la lapicera camporista borró a las gestiones provinciales distritales de las listas, solo hubo lugar para los propios, algunos buscando refugio legal (inmunidad) y también conchabo. Nada que criticarle a Kicillof, porque hasta él fue ninguneado en las listas legislativas.
Por eso me parece importante mostrar el hecho de esta visita del gobernador a José C. Paz, ubicada geográficamente en el corazón del noroeste del conurbano.
OBRAS SON AMORES Y VOTOS
Kicillof fue recibido por el intendente paceño Mario Ishii, y junto al ministro de Infraestructura y Servicios Públicos Leo Nardini, y al vicepresidente 1º del senado bonaerense, Luis Vivona (ambos de Malvinas Argentinas, de extensa frontera con el distrito paceño).
Con el marco imponente de la construcción de la nueva facultad de Ciencias, Tecnología, Innovación, Robótica e Ingeniería, con fondos municipales, que se sumará a la de Medicina ya en funciones en una Universidad Nacional de José C. Paz con 53.000 alumnos, rodeado de tres dirigentes de talla del peronismo, por voluntad y gestión de obras y no por un dedo mesiánico, ni por una lapicera caprichosa, nunca mejor que en esos momentos se lo vio al gobernador tan bien custodiado electoralmente.
Esta vez es una elección difícil, el fracaso de la gestión de Alberto Fernández tiñe de incertidumbre el futuro electoral, sin cargarle las tintas al profesor porteño canchero, que sufrió pandemia, guerra, pago de la deuda que dejó Macri y sequía, pero él no es el presidente épico que se necesitaba, solo un administrador y comentarista televisivo de la crisis.
Así que los intendentes, primera línea en contención de masas en épocas difíciles, primera línea en buscar los votos, repartir boletas y fiscalizar, son los protagonistas. Cuando se pide “barrio por barrio y casa por casa” se le pide a los intendentes, y a algunas organizaciones nacionales con vuelo propio militante, pero fundamentalmente a los intendentes.
José C. Paz y Malvinas Argentinas, con Mario Ishii, Leo Nardini y Luis Vivona son un remanso para las inquietudes de Kicillof y Sergio Massa. Acá hay votos, hay estructuras políticas, hay gestión y sobre todo hay historia, son tres generaciones en una, son la sal de la tierra, son el peronismo de la primera sección electoral en su versión Premium. Nunca sacaron los pies del plato, se tragaron sapos pero nunca produjeron fracturas políticas, persistieron y con muñeca y gestión hicieron crecer a sus distritos.
Si el futuro no es adverso, si se consigue parar a la derecha electoralmente, sería bueno que los que acaparan las primeras planas en el triunfo, se acuerden de que tan pocos le deben tanto a tan muchos. Que si el pescado se pudre por la cabeza, las situaciones adversas se bancan desde las bases, que cuando cunde el pánico político y buscan ayuda con la mirada, solo van a encontrar a los intendentes peronistas, que siempre están para sacar las papas del fuego… “VERITAS VITAE” (Verdad de la vida).