Después de la desaparición forzada de Santiago Maldonado, durante la represión de gendarmería a una protesta de originarios en Chubut, los trolls macristas «bajaron línea» para embarrar la cancha, mezclando en el tema a la desaparición de Julio López y víctimas de trata.
Obviamente, cuando el juez Otranto caratuló como desaparición fozada de persona, el caso de Maldonado, legalmente involucra al estado nacional, en la figura de la gendarmería y, por declaraciones de jefes de esa fuerza, a la ministra Patricia Bullrich por medio de su jefe de gabinete Pablo Noceti, presente en el lugar durante la represión. Este hecho da como singular esta desaparición, siendo la primera forzada en democracia, con intervención del estado.
Pablo Nocetti, cuya presencia involucra al ministerio de Seguridad, fue abogado defensor de acusados de delitos de lesa humanidad. Esto cierra el círculo de quiénes manejan la seguridad en nuestro país en la gestión del frente conservador Cambiemos.
Pero para agravar el tema, hemos recibido documentos que publicamos a continuación, donde se alerta a las fuerzas armadas, en este caso la aeronáutica, y a las fuerzas policiales provinciales, en prevención de caos social por la campaña de aparición con vida de Santiago Maldonado. Un auténtico relato, del que ya se hacen ecos los medios adscriptos al régimen conservador, fabulando y preparando la situación para reprimir y encarcelar opositores, lo que podría incluso llegar a cerrar con el estado de sitio.
Pero no es por el tema de Santiago esta prevención, buscan provocar para reprimir y hacer pasar su plan económico, ya anunció el ministro Aranguren que después de octubre hay un nuevo tarifazo; se baraja una reforma jubilatoria perjudicial para el pueblo trabajador; se planea en avanzar sobre la eliminación de conquistas del mundo del trabajo; y así toda una serie de medidas socioeconómicas para favorecer al capital concentrado, descargando la crisis sobre el pueblo. para esto cuentan con reprimir, encarcelar y hasta conculcar libertades democráticas mediante un probable estado de sitio, de considerarlo necesario.
Hoy más que nunca las libertades democráticas están en peligro. De la serenidad de la dirigencia opositora y de su firmeza, así como fundamentalmente del protagonismo popular sin caer en provocaciones, depende el sostener la vida en democracia plena.