Néstor Cruz, Coordinador Territorial de Desarrollo Social y Salud de la Nación y dirigente de Cambiemos, en Malvinas Argentinas, denunció ser agredido por su vecino José Bogado, colaborador del ex intendente Jesús Cataldo Cariglino. La denuncia penal fue radicada en la UFI 20 del distrito bajo la caratula lesiones y daños.
La violencia política es moneda corriente por parte del sector del ex intendente en los barrios de Malvinas Argentinas, acentuándose aún más en años de elección. Es así que la tropa de Jesús Cariglino tuvo su primera gran víctima en lo que corre de este 2019, con la agresión a uno de su propio palo.
El agredido, Néstor Cruz, se desempeña como Coordinador Territorial de Desarrollo Social y Salud de la Nación y trabaja para la ministra Carolina Stanley. Cruz, aseguró que fue agredido ferozmente por un colaborador del ex intendente Jesús Cariglino, de apellido Bogado, el cual luego de romper su vehículo lo agredió físicamente en plena vía pública ante varios testigos con total impunidad.
La interna de Cambiemos en Malvinas está al rojo vivo y hasta el concejal Néstor Marcote, presidente del bloque Cambiemos en el distrito, salió a solidarizarse en sus redes sociales por lo ocurrido con Cruz. “Mi total solidaridad con Néstor Cruz y mi profundo repudio a estas manifestaciones de agresión. La fuerza y la violencia son el derecho de las bestias. Mis deseos que en Malvinas se termine con todo esto y la política se viva en paz”, manifestó el edil en su muro de Facebook.
A sus casi 70 años, Cariglino quiere revancha y, de la mano de Mauricio Macri, se proyecta como el candidato a “nuevo” intendente para ese distrito, pero con sus viejas artimañas, no tiene reparos en cambiar de camiseta y enfilar para donde el viento sople. De hecho, en 2006 se hizo kirhcnerista, aunque fue candidato por el PJ en 2007; en el 2011 cambió el color de su boleta y fue otra vez reelecto bajo el paraguas del Frente Popular de Eduardo Duhalde; en 2015 no dudó en dejar su rostro en la boleta del Frente Renovador de Sergio Massa, aunque tras su derrota, a las pocas horas estaba en pleno desembarco en las filas del PRO.
Nada nuevo bajo el sol, don Cataldo conoce solo un método de campaña electoral, que le dio resultado durante casi veinte años, el de la intimidación y la violencia. Pero ahora esos modos ya no sirven, los malvinenses construyen en esta nueva gestión de Leo Nardini “El lugar de la familia”, y no de la patota.
Ya antes el concejal de Cambiemos Marcote, que no es cariglinista, había sufrido amenazas en el propio Concejo Deliberante, por parte de la patota que rodea a Maxi Cariglino. Así que la interna de Cambiemos Cariglino la intenta dirimir con amenazas y violencia. El peronismo gobernante en el distrito debe agradecer a María Eugenia Vidal y a Mauricio Macri, que avalen a don Cataldo y su patota: Cariglino es Vidal y es Macri.
Gente de Cambiemos opina que llegado el momento, y viendo que sus métodos violentos ya no funcionan, Cariglino se baje de la postulación a intendente, antes de sufrir otra humillante derrota.